Muchos hemos opinado sobre algún tema o hecho un reclamo sobre alguna situación cotidiana a través de nuestros estados en Twitter y Facebook, pero no todos pensamos en las consecuencias que puede tener un mensaje en una red social.
¿Qué problemas nos puede traer un estado en las redes sociales? Hay varios casos en los que una opinión o descargo en alguna red social ha provocado grandes problemas, e incluso la pérdida del trabajo de una persona.
Ejemplo de esto es lo que vivió un periodista de una conocida radio chilena, quien fue
fue despedido de su trabajo por escribir un estado en su Facebook en el que se refiere con insultos al Ministro del Interior. Según el periodista, era imposible que sus compañeros de trabajo supieran que escribió ese mensaje, porque tenía su cuenta protegida y no había agregado como “amigo” a nadie del trabajo.
Otro bullado caso fue el del responsable “New Media” del Real Madrid, Pedro Duarte, quien fue despedido luego de hacer una serie de comentarios en los que involucra al Rey de España, a las Comisiones Obreras (CCOO) y la Unión General de Trabajadores (UGT) de España, además de hacer alusiones al accidente que sufrió el nieto del Rey cuando se disparó en un pie hace unos meses.
Sin duda, el mensaje que provocó mayor revuelo fue el que escribió en contra de las Comisiones Obreras y la UGT, pidiendo su exterminio, luego de una serie de protestas sociales que se llevaron a cabo en ese país.
Los mensajes de Duarte provocaron gran molestia dentro del club, lo que provocó su inmediato despido, ante lo que él se defendió argumentando que fue “descontextualizado”.
Por otro lado, el inglés Samuel Crisp, empleado de una Apple Store de White City (Gran Bretaña), fue despedido luego de quejarse porque su iPhone perdiera la zona horaria por tercera vez en un día e ironizara sobre el lanzamiento de canciones de los Beatles en iTunes. A pesar de que los mensajes del Facebook de Crisp eran privados y sólo podían verlos sus contactos, un compañero de trabajo que era su “amigo” en la red social le contó a su jefa, provocando el despido del trabajador.
Ante la defensa del trabajador, los tribunales británicos resolvieron que el despido es justificado porque los comentarios de Crisp corresponden a una “conducta improcedente” en contra de la compañía.
La especialista en Oriente Medio de la cadena CNN, Octavia Nasr, perdió su empleo luego de haber twitteado en su cuenta personal que estaba triste por la muerte de Mohammed Hussein Fadlallah, ex líder de Hezbollah que es considerado como “terrorista” en Estados Unidos, a quien se refirió como “un gigante que merece mi respeto”. El canal justificó el despido diciendo que la periodista cometió “un error de juicio”.
Si bien, cada uno publica lo que quiere, hay redes más “cerradas” como Facebook, donde uno puede decidir quién ve sus publicaciones, la privacidad no está asegurada en ningún lugar de la red. En el caso de Twitter es aún mayor la probabilidad de que cualquier persona pueda ver un mensaje, esto gracias al RT y a que, a menos que tu cuenta esté protegida, cualquier persona puede ver y replicar los twitts. Así que, cuidado con lo que publicas, para que no vayas a perder tu trabajo por un inocente mensaje en las redes sociales.
